Sigue el conflicto, siguen los paros

Será para el miércoles 31 de agosto y jueves 1 de septiembre en reclamo de “la reincorporación inmediata de las compañeras despedidas por hacer uso del derecho a huelga, exigir paritarias libres, que ningún docente viva por debajo de la línea de la pobreza y para ello demandan un salario inicial de 120 mil pesos para el cargo testigo, retroactivo al mes de julio con cláusula de indexación de acuerdo a los índices inflacionarios que experimente el país. Repudiar el recorte de presupuesto del gobierno nacional a través del Ministerio de Economía, conducido por Sergio Massa, que afecta directamente a la educación, al tratamiento de la discapacidad, a la salud y vivienda. Rechazar la reforma laboral que implica la puesta en práctica de la jornada extendida, continuar exigiendo mayor inversión en infraestructura, denunciar la precariedad y arbitrariedad que se ha impuesto a los cargos de preceptor/a y maestro/a de apoyo a la inclusión pertenecientes a la Modalidad Especial…”

Son algunos de los puntos que el gremio que nuclea a la mayor cantidad de docentes en Santa Cruz, reclama desde el inicio del ciclo lectivo y que no han encontrado, en las reuniones mantenidas con el Consejo Provincial de Educación, las respuestas que satisfagan las necesidades del sector.

Los cierto es que, ante la falta de un acuerdo entre las partes, los niños que asisten a escuelas estatales y semi privadas de la provincia, no están completando ni una semana de clases. Situación que preocupa a los padres, no sólo por la falta de aprendizajes y socialización, sino también en lo que respecta a la organización familiar.