Una pequeña gigante en la Gran Ciudad

La jugadora de fútbol de salón, Paola Burgos, con bases en el Club Universitario de Caleta Olivia fue convocada por la institución histórica para la Copa Argentina

Paola estará viviendo el sueño de muchas chicas de ciudades del interior y alejadas de la capital federal, de jugar en la primera división de una institución tan importante del fútbol de salón. “Estoy super contenta, nerviosa, es una oportunidad que se da una sola vez en la vida, hace mucho tiempo que vengo esperando una oportunidad así”, contó a PREMISA

Las puertas se le abrieron a Paola, tras la participación, junto a su Club Universitario, en el Nacional de Clubes el año pasado en Esquel. Fue una competencia que aprovecharon los representantes y “caza talentos” para fichar a jugadoras de gran nivel. Fue el caso de Paola Burgos, que llamó la atención de un representante que la contactó con la oferta de ser su manager durante dos años. El representante de la jugadora compartió videos de Paola demostrando su talento natural y producto de la disciplina, el entrenamiento responsable y la constancia.

Este muestreo fue suficiente para llamar la atención del Club Ferro de Buenos Aires, que le solicitó a la jugadora que viaje y se instale una semana para conocer al grupo y participar de los entrenamientos. “Agradezco a Roberto Acosta y a la Agrupación Construyamos un sueño que me ayudó con los pasajes, ya que salió todo a las apuradas y no contaba con los fondos para viajar en ese momento”, contó Paola.

Tras esa semana en la Capital Federal, el técnico del plantel femenino de primera división de Ferro le solicitó a la jugadora que volviera para disputar la Copa Argentina que será hasta el 15 de diciembre. “Luego veremos qué pasa y cuál será el rumbo de mi carrera”.

Al ser consultada respecto al manejo del desarraigo, Paola Burgos explicó que sabe que le costará, ya que sus compañeras de equipo de acá, el cuerpo técnico de Universitario y su familia son muy importantes para ella. “Por suerte el Club Ferro puso a mi disposición un departamento donde mi familia podrá visitarme cuando quiera y pueda para acompañarme y apoyarme”, finalizó Paola.

Quizás por la emoción, la ansiedad, los nervios y las expectativas es que cuando le preguntamos a Paola si es consciente de que es un orgullo para la ciudad, su respuesta algo tímida fue: “Si, un poquito si”.

Éxitos pequeña en este sueño que es tuyo, pero compartido por muchos y muchas!!!